He visto a muchas personas detestar términos como “ponerse la camiseta por la empresa” y que dicen que jamás se debe hacer nada extra de por lo que te pagan.
Esas personas están dañadas.
Y no me malentiendan, no es una ofensa. Es que de verdad, los trabajos por los que han pasado los han tratado tan mal que los dañaron y les crearon esa visión pesimista de la vida. Por ejemplo, en uno de mis primeros trabajos me hicieron trabajar un mes completo por 50 soles (unos 13 dólares) que no me alcanzaban ni para comprarme un par de zapatos nuevos (los que usaba estaban rotos y me causaban mucho dolor).
Cuando les pedí el resto de mi pago me dijeron que debía ponerme la camiseta. Incluso me nombraron a otras personas que supuestamente no habían cobrado porque estaban comprometidos con la empresa. Me dañaron también.
En otra empresa, nos pagaban siempre tarde y por partes, casi sentíamos que mendigabamos nuestro sueldo. Pero luego veíamos llegar al dueño con carro nuevo. ¿Cómo no voy a estar de acuerdo con que jamás hay que ponerse la camiseta por nadie?
Pero hace unos años cambié el chip. Un amigo mío consiguió trabajo en una gran empresa y de la noche a la mañana no tenía tiempo para nada, menos para los amigos. Las pocas veces que hablaba con él me contaba sus extremos turnos de trabajo y yo le decía que estaba loco, que haga eso por su propia empresa pero no por terceros. Pero él me decía que tenía un plan, iba a trabajar unos años, hacer muchos contactos y adquirir habilidades en ese trabajo que de otra manera no podría. Estaba tan seguro que me decía que si no le triplicaban el sueldo en x años se iba.
Estaba dando el mil por ciento pero por un plan personal bien estructurado. Y le funcionó. Tenía un pequeño negocio que creció durísimo gracias a las habilidades y los contactos adquiridos y abrió oficinas en el extranjero. La empresa le subió de rol con salarios envidiables, viajes, oficinas en estados unidos, etc. Yo no podía creerlo. Había crecido en tres años lo que al promedio de nosotros nos puede tomar más de 10.
¿Moraleja? Hay muchas empresas tóxicas pero si generalizas y te vuelves rencoroso y pesimista diciendo que nunca hay que dar más por nadie, te vas a alejar de muchas oportunidades. Además vas a llenar tu mente de frases negativas y vivirás a la defensiva. Y una persona que vive a la defensiva no crece.
Da siempre más, corre la milla extra. Pero por ti. Para desarrollar habilidades que te ayudarán a crecer. Da más para ser el tipo de persona que siempre va más allá del promedio. Da más porque los ganadores dan más. Y si alguien no lo valora, él (o esa empresa) se lo pierde.
Sal de ahí rápido y busca quien lo valore. Spoiler: siempre hay quien lo valore.
Pero no vivas en modo queja porque te dañas más de lo que ya estás.
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