Hace unos días publiqué un video en el que recomendaba libros que te enseñan a hacer contactos que te ayuden a crecer. Y no faltó el tipo de personas que solo ven lo negativo (hasta en un consejo) acusándome de querer convertirlos en hipócritas y chupamedias.
Te voy a contar una historia que explica por qué existen personas así.
Aproximadamente en el siglo IV antes de nuestra era, el filósofo griego Platón escribió el mito de la caverna, que es una alegoría sobre la ignorancia y el conocimiento.
En el mito de la caverna, Platón presenta a un grupo de personas encadenadas en una cueva de tal manera que solo pueden mirar al frente. Detrás de ellos arde un fuego que proyecta sombras hacia adelante. Y estas sombras y la luz del fuego en el muro son lo único que las personas en la caverna pueden ver. Por lo tanto, son su única realidad, no conocen nada más, y creen que todo lo que existe en en el mundo son esas luces y esas sombras.
Ahora supongamos que una persona logra liberarse de sus cadenas, voltea y lo primero que ve es la luz que está detrás de él. Esto lo impresiona y no puede creer que esa luz siempre estuvo ahí y que es la que proyecta las sombras.
Luego, confundido aún por el descubrimiento, sale de la cueva y ve la luz del sol. Esta ciega sus ojos que solo están acostumbrados a la oscuridad, pero poco a poco se va adaptando y empieza a ver un mundo extenso, en el que puede moverse en todas las direcciones, donde puede apreciar la naturaleza y se da cuenta que siempre ha vivido en un engaño, encadenado en una caverna sin la capacidad de conocer que hay allá afuera.
Entonces piensa todos sus compañeros de la caverna merecen conocer este descubrimiento, salir de su engaño y conocer el mundo real.
Así que regresa a la caverna y les dice a sus antiguos compañeros todas las cosas increíbles que hay allá afuera, que lo que ven ellos es solo una ilusión. Que se liberen de las cadenas y lo sigan para conocer el mundo real.
Pero sus compañeros, se burlan de él, le dicen que está loco y que es estúpido, porque la única realidad son las sombras que ven en el muro de la cueva. Y mientras más intenta el hombre liberar a sus compañeros para que conozcan esta nueva realidad, más resistencia encuentra y más insultos y burlas.
Esta alegoría de Platón, representa la lucha entre el conocimiento y la ignorancia, de lo difícil que es convencer a una persona de que existe una realidad más grande de la que conoce. Y que el mundo no está limitado a sus creencias o a lo que le tocó vivir. Y de los insultos y burlas que uno recibe por decírselo.
Por eso, cuando hablo de la importancia de hacer contactos llegan personas ofendidas que dicen que eso es injusto, otros dicen que soy un chupamedias y que gracias a eso he escalado en la vida (y lo dicen sin conocerme). Otros dicen que no son hipócritas y que no seguirán consejos de un hipócrita (o sea, yo).
No son más que las personas en la cueva insultando al que salió y que quiere ayudarlos a salir.
Pero siempre hay personas, aunque pocas, que entienden el mensaje, lo evalúan en su mente y piensan: “tiene sentido” y luchan por liberarse de sus cadenas y salir a la luz del sol. Seguramente eres tú uno de ellos.
Y los demás… ni modo quizás algún día se den cuenta que viven en una cueva, atrapados en las cadenas de sus prejuicios, de sus malas experiencias de vida, de sus malas decisiones y de la victimización.
Si realmente quieres crecer y convertirte en una persona nueva, debes liberarte de las cadenas de tu mente. Un mejor trabajo, más dinero, una mejor casa, viajes o amigos nuevos serán solo una ilusión mientras no te liberes de las cadenas y salgas de la cueva.
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